El cheque es una orden escrita y girada contra un banco para que éste pague a su presentación el monto total del cheque, descontando su valor de los fondos que el cliente depositó previamente en la cuenta corriente o utilizando el crédito pactado previamente con el banco si lo tuviere.
Por este motivo el titular de una cuenta corriente debe emitir cheques siempre que cuente con los fondos suficientes para cubrir su monto, de lo contrario el Banco podrá protestar el documento, hecho que acarreará necesariamente consecuencias desfavorables.
Más información sobre este tema se puede encontrar en el Título III del Capítulo 2-2 de la Recopilación Actualizada de Normas de Bancos de la CMF y en el artículo 10 del DFL Nº 707 sobre "Cuentas Corrientes Bancarias y Cheques".